En un ambiente de fraternidad cristiana, el Seminario Mayor San Carlos y San Marcelo celebró 388º de fundación con una Misa de Fiesta presidida por el Arzobispo de Trujillo, Mons. Miguel Cabrejos Vidarte OFM., y concelebrada por Mons. Eduardo Velásquez, Obispo de Huaraz, Mons. Lino Panizza, Obispo de Carabayllo, Mons. Sebastián Ramis, Obispo de Huamachuco, asimismo por Mons. Simón Piorno, Obispo de Chimbote, Mons. Javier Travieso, Obispo auxiliar de Trujillo y del rector de esta casa de formación, R.P. Jaume Benaloy.
En su homilía el prelado trujillano recordó que el Ministerio sacerdotal no es un “oficio”, sino un Sacramento, “por eso se trata de una realidad grande, trascendente, confiada a hombres “ escogidos de entre los hombre y constituidos a favor de la gente” y que muestra, sobre todo, la “audacia de Dios, que se abandona en las manos de seres humanos; que , aun conociendo sus debilidades, considera a los hombres capaces de actuar y presentarse en su lugar. Esta audacia de Dios es realmente la grandeza que se oculta en la palabra sacerdocio” explicó el prelado.
La Eucaristía, celebrada en el Santuario del Señor de la Divina Misericordia, reunió además al clero, religiosos, religiosas, seminaristas, personal administrativo, docentes, amigos bienhechores, familiares, entre otras personalidades.
Culminada la celebración Eucarística, todos los participantes inmortalizaron el momento con una postal en el frontis del Seminario. Enseguida fue el almuerzo de confraternidad entre todos los presentes, asimismo se premiaron a los ganadores de las Olimpiadas en sus diferentes disciplinas deportivas.
El Seminario.
El Seminario Mayor San Carlos y San Marcelo forma por ocho años a jóvenes que serán los futuros pastores del pueblo de Dios, diseminado por diferentes lugares.
